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Dependencia.-CyL

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Dependencia.-CyL destinará a Dependencia un 11% más, hasta 466 millones, más del 50% del presupuesto de Familia

  VALLADOLID, 31 Oct. (EUROPA PRESS) -


   La Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León  destinará 466 millones de euros a potenciar las políticas de promoción de la autonomía personal y atención a la Dependencia, un 11 por ciento más que el ejercicio actual (47 millones más), lo que supone más de la mitad del presupuesto de este departamento de la Junta de Castilla y León.

   Así lo afirmó el consejero de Familia, César Antón, quien compareció hoy en las Cortes para explicar las cuentas de su departamento, que pretende potenciar todas aquellas medidas de prevención de las situaciones de dependencia y apoyo a la autonomía personal. Del total destinado a este fin, el 17 por ciento lo aporta la Administración General del Estado (81,3 millones) y la Junta el 83 por ciento (384,7 millones).

   Para ello, indicó Antón, se fomentarán actuaciones relacionadas con el envejecimiento activo, las actividades de estimulación cognitiva y el mantenimiento de habilidades en las personas dependientes y "predependientes".

   Además, explicó que se continuará avanzando en la aplicación de la Ley de Dependencia mediante la potenciación de las medidas que permitan a las personas estar el mayor tiempo posible en su entorno familiar "y por tanto en el domicilio" mediante servicios de proximidad como la teleasistencia, ayuda a domicilio y centros de día y noche, "que respondan a las demandas de las familias".

SUBPROGRAMAS.

   Dentro de este apartado, la Consejería incluye los servicios sociales básicos e integración social, que cuenta con una dotación de 110,3 millones (16,9 más que el ejercicio actual, un 18,2 por ciento más); la atención a las personas con discapacidad, con 138 millones (12,3 millones y un 9,8 por ciento más); y la atención a las personas mayores, que tiene un presupuesto de 217,9 millones de euros (17,3 millones y un 8,64 por ciento más que en 2008).

   En el primero de los apartados, se destinan 83,5 millones a personal técnico de equipos multidisciplinares y el servicio de ayuda a domicilio, otros 911.000 euros a teleasistencia y 26 millones a otras prestaciones de la dependencia, partida con la que se pretende hacer frente a las prestaciones económicas a que tengan derecho las personas declaradas dependientes. Asimismo, se contemplan 4,5 millones de euros para integración social, línea "prioritaria" para el próximo año, explicó el consejero.

   En cuanto a la atención a las personas con discapacidad, se pretende mantener la amplia red de plazas de gestión pública para personas con discapacidad intelectual y las de personas con discapacidad física, así como dar un importante impulso a la atención a las personas con enfermedad mental.

   Entre otras inversiones en este apartado, para el mantenimiento de los centros de entidades locales se destinan 1,9 millones de euros y 29,7 a las familias e instituciones sin ánimo de lucro de la Comunidad, que tienen entre sus máximos exponentes el apoyo a la red de atención a discapacitados intelectuales a través de Feaps Castilla y León con 22,5 millones de euros (un 12,72 por ciento más).

   Por otra parte, y entre otras actuaciones, se dedicarán más de 13 millones a la mejora de los centros para atención a personas discapacitadas y se intervendrá en la mejora de los centros base. En concreto, se iniciarán las actuaciones para construir un nuevo centro en Valladolid para desarrollar los Programas de Atención Temprana y Valoración de Minusvalías acorde a las necesidades de la población de la provincia, lo que tendrá un coste de unos cinco millones, mientras que se reformará el centro de Ávila y se finalizará la construcción del de Zamora. Además, se continuará la construcción de las "mini residencias" para enfermos mentales de Ávila y Burgos y del Centro de Atención Integral para personas con Discapacidad Intelectual de Vitigudino (Salamanca).

   En el caso de atención a personas mayores, se pretende atender fundamentalmente las actuaciones de las líneas estratégicas de mejora de la calidad de las infraestructuras, a las políticas de promoción de la autonomía personal y atención a la dependencia y la colaboración con las corporaciones locales. Así, se impulsarán las políticas de envejecimiento activo y de promoción de la autonomía personal y se crearán centros de día de atención social en las localidades de más de 5.000 habitantes, de manera que se consolidarán plazas de estancias diurnas para personas dependientes y se crearán y transformarán plazas residenciales.

   También en este marco se pretende prestar una especial atención a las personas con problemas de Alzheimer y sus familiares.

OTRAS LÍNEAS DE ACTUACIÓN.

   A la atención a la Dependencia se suman otras nueve líneas de actuación que el consejero de Familia detalló a lo largo de su intervención, la primera de las cuales se refiere a la creación y mantenimiento de plazas infantiles para la atención de niños de hasta tres años y para favorecer la conciliación de la vida familiar y laboral, de manera que se construirán 50 nuevos centros con 1.400 plazas públicas y se mantendrán las 11.300 existentes, para lo que se destinarán 18 millones.

   Otra de las líneas es el mantenimiento y consolidación de las líneas de ayudas directas a las familias, para lo que se destinarán 37 millones con los que se espera beneficiar a 36.000 familias, mientras que otro de los ámbitos en los que pretende actuar la Consejería es seguir avanzando hacia la igualdad entre mujeres y hombres, con medidas que supondrán 6,4 millones de euros.

   Además, se destinarán cinco millones de euros para luchar contra la violencia de género y se trabajará en la prevención de las drogodependencias, apartado al que se destinarán 1,5 millones de euros.

   Una sexta línea se refiere a juventud, apartado en el que Antón destacó el hecho de que el próximo año sea el primero en el que todas las partidas presupuestarias estén vinculadas al recién estrenado Instituto de la Juventud de Castilla y León, con una dotación de 30,5 millones de euros.

   Además, la Consejería contempla entre sus principales líneas de actuación el desarrollo e impulso de la red de servicios sociales, con la mejora de la calidad de las infraestructuras de los centros con plazas de gestión pública (68,4 millones). También se fija como prioridad dar respuesta a las situaciones de urgencia social emergentes, sobre todo ante la situación económica actual, para lo que se dispondrá de 33 millones.

   Finalmente, César Antón destacó como última línea de actuación la colaboración con las corporaciones locales de la comunidad, mecanismo que considera "eficaz" para hacer llegar los servicios al medio rural, por lo que se potenciará en el próximo ejercicio, cuando tendrá un presupuesto de más de 116 millones.

MINIRRESIDENCIAS

MINIRRESIDENCIAS

La Comunidad contará con una red de minirresidencias para personas con una enfermedad mental grave


El primer centro se pondrá en funcionamiento durante el primer semestre de este año en la localidad zamorana de Toro, aunque la previsión de la Junta es abrir uno en cada provincia
ICAL / VALLADOLID

Castilla y León contará a lo largo de esta legislatura con una red de minirresidencias para las alrededor de 20.800 personas con enfermedad mental grave y prolongada que viven en la región. Se destinarán a aquellos que se encuentren en situación clínica estable que necesiten un alojamiento y que por sus necesidades de apoyo no puedan acceder en un primer momento a un recurso de vivienda. El objetivo de estos lugares será proporcionar con carácter temporal o definitivo los servicios de alojamiento, manutención, cuidado, apoyo personal y social, así como la habilitación y el apoyo a la integración de estas personas, según explicaron fuentes de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades.

En principio, habrá una minirresidencia por provincia, en régimen abierto y sin carácter terapéutico, y cada una tendrá entre 30 y 40 plazas. Los centros estarán destinados a personas con edades comprendidas entre los 18 y los 64 años y un grado de minusvalía igual o superior al 33 por ciento que carezcan de familia o que teniéndola no puedan por circunstancias familiar atenderles de forma temporal o permanente.

Servirán para dar respuesta «a una necesidad social», al tiempo que la Administración persigue «que sean un medio integrado en la Comunidad» que permita mejorar la calidad de vida de las personas con esta discapacidad, «respetando todos sus derechos personales de intimidad (cuentan con habitaciones individuales), autodeterminación, autocontrol, todo ello con vistas a que las personas allí alojadas puedan habilitarse para llevar en un futuro una vida más autónoma e integrada».

La primera se pondrá en funcionamiento en el primer semestre de 2008 en la localidad zamorana de Toro. Además, la Gerencia Regional de Servicios Sociales ha comenzado ya los trámites para la construcción directa de una de estas minirresidencias en Ávila, con un presupuesto de licitación de 3,91 millones de euros. Tendrá una capacidad de 45 plazas, distribuidas en módulos de entre seis y ocho plazas cada uno, de modo que favorezcan la convivencia independiente de estos grupos.

Junto a estos dos centros, también están en proyecto otros dos, uno en Burgos, de titularidad de la Gerencias de Servicios Sociales y otra en Salamanca, cuya titularidad será de la Diputación Provincial de Salamanca. A ellos se irán sumando, de forma progresiva, los centros del resto de provincias, precisaron fuentes de la Consejería de Familia.

Estancias temporales. Las minirresidencias constituirán un recurso de apoyo a las familias, ya que todas contarán con un porcentaje de plazas reservadas a estancias temporales de mayor o menor duración que se utilizarán de manera periódica y según las necesidades de las familias, con el fin de que puedan «continuar con su proyecto de vida que, sin duda, se ve gravemente alterado cuando no se dispone de recursos de respiro familiar». El fin es que la persona pueda permanecer en su núcleo familiar sin alterar gravemente la dinámica del hogar.

Los centros contarán con un equipo multidisciplinar que proporcionará atención con supervisión durante las 24 horas, al igual que se promoverán la adhesión al tratamiento terapéutico por medio de responsables de los servicios de la red de salud mental de la provincia de referencia; se apoyará la inserción laboral y se posibilitará el acceso a alojamientos más integrados en el entorno de la Comunidad.