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ATENCIÓN Y APOYO PSICOSOCIAL

SALUD MENTAL - dia mundial

SALUD MENTAL - dia mundial

Día Mundial de la Salud Mental

POR ISABEL ARBONIÉS - Jueves, 7 de Octubre de 2010 - Actualizado a las 04:12h.

 

ENTRE las personas con trastornos mentales existe un grupo en clara desventaja por su doble diagnóstico: déficit intelectual (o retraso mental) y enfermedad mental, además de otras patologías. Se les denomina los duales y a nosotras, sus madres, nos definen como las madres con doble desgracia. El pasado Día Internacional de la Discapacidad, tanto Foro de Salud Mental como Anfas alertaron sobre la falta de recursos asistenciales para ellos en Navarra. Hasta hace poco, su compleja realidad se simplificaba atribuyendo los trastornos psiquiátricos a la propia discapacidad. Estudios recientes demuestran que las personas con déficit intelectual presentan los mismos trastornos mentales que el resto de la población y en tasas más elevadas (del 30% al 50%).

Históricamente las personas con este doble diagnóstico han vivido institucionalizadas. Cuando el Estado puso en marcha la reforma psiquiátrica de 1985, ni los programas de desinstitucionalización ni los posteriores planes de Salud Mental de las comunidades tuvieron en cuenta su derecho a recibir atención específica en el nuevo modelo de atención comunitaria. En Navarra la reforma traspasó de forma automática las personas con retraso mental del psiquiátrico de Pamplona a la gestión privada. La Comunidad Foral se quedó sin ningún dispositivo público de hospitalización de media y larga estancia y este grupo con diagnóstico dual constituyó el grueso de los desterrados por Bienestar Social a otras CCAA, desde el momento que pasó a gestionar el denominado espacio sociosanitario.

Según los datos de Foro Salud Mental, de las 3.300 personas con déficit intelectual en Navarra, más de un tercio sufren la doble condición de deficiencia intelectual y enfermedad mental, porcentaje que crece conforme avanza el acceso al diagnóstico clínico. Hoy como ayer son víctimas del enfoque simplificador y fragmentado entre diferentes departamentos y entre dos niveles de reconocimiento de derechos ciudadanos: el sanitario (objetivo y gratuito) y el social (subjetivo y con copago).

Los adultos dependen básicamente de servicios cuya llave de acceso es la Agencia Navarra para la Dependencia. Con la reciente y ya recortada Ley de Dependencia han de pasar por ese embudo de obstáculos administrativos que es la valoración del grado de dependencia a través de un único baremo enfocado a los mayores, ineficaz para evaluar a personas con déficit intelectual ni enfermedad mental, mucho menos con ambas circunstancias. En ese largo proceso se decide todo: el reconocimiento de derechos, garantías, prestaciones y ayudas para completar el copago de los servicios. Luego está la cruda realidad: insuficiencia de plazas y falta de recursos especializados. Las personas con síndrome autista son un claro ejemplo de ausencia de recursos especializados en Navarra.

 

Salud Mental sigue siendo la Cenicienta de nuestra sanidad y este delicado grupo humano sigue rezagado

Reivindico el derecho de nuestros familiares a una cuota aceptable de bienestar físico, mental y social

 

La irrupción de los trastornos mentales en la población con déficit intelectual tiene un impacto negativo importantísimo y requiere reajustes y atención más intensa. Si el circuito asistencial comunitario no cuenta con recursos intermedios y programas especializados, están abocados a la institucionalización prematura con la enorme dificultad que eso significa al no existir en Navarra ninguna residencia asistida para personas con enfermedad mental y déficit intelectual, ni pública ni concertada, excepto la reciente posibilidad de ocupar una plaza privada en Elizondo. Una solución adecuada pero que cuenta con los obstáculos del reconocimiento del derecho subjetivo y la financiación a través de ayuda económica vinculada al servicio que suele tardar meses en hacerse efectiva. Aquí es donde la equidad se rompe. Quien tiene recursos económicos accede rápidamente a la asistencia especializada.

La atención sanitaria de los duales es una necesidad y una prioridad. Sin embargo, no cuentan con protocolos de atención ni controles de la salud pese a las multipatologías que presentan y a los efectos secundarios adversos de la medicación que soportan, ni los que viven con sus familias ni los que están institucionalizados. Como otros crónicos sufren descompensaciones y agudización de síntomas que requieren ingresos en nuestros hospitales públicos que sólo cuentan con unidades de corta estancia. Los servicios de urgencias hospitalarias no están preparados para personas tan vulnerables y dependientes de su entorno. El acceso debiera hacerse directamente en las unidades de agudos, donde el personal está preparado para su acogida.

Salud Mental sigue siendo la Cenicienta de nuestra sanidad y este delicado grupo humano sigue rezagado y olvidado como el zapato de Cenicienta. Falta voluntad, recursos y programas especializados. La demora en la atención por sobrecarga de la red de salud mental y su falta de especialización para atender a las personas con déficit intelectual y trastornos mentales, dificulta el diagnóstico y la planificación del tratamiento. Son pacientes con grandes dificultades en expresar adecuadamente sus problemas y los síntomas aparecen de forma diferente, lo que hace necesario un buen conocimiento científico, percepción muy fina y tiempo para alcanzar una evolución favorable.

25 años después de la inacabada reforma psiquiátrica parece que las instancias administrativas de Salud y Bienestar Social, empujadas por las demandas insistentes y la tozuda realidad, quieren reorganizar a futuro el circuito asistencial y poner en marcha programas especializados. El presente tiene colgado el cartel de crisis. De momento nos quedamos en manos de los buenos profesionales que afortunadamente tenemos en Navarra, tanto en los servicios sociales como en los sanitarios, que buscan con empeño tratamientos y pautas de actuación con evidencia de resultados. Lo hacen desde el sacrificio personal, traspasando los límites del sistema porque saben que sin ello la vida de los afectados y su entorno no sería viable.

En el Día Mundial de la Salud Mental reivindico el derecho de nuestros familiares a una cuota aceptable de bienestar físico, mental y social que la OMS define como salud y propongo: que la atención sociosanitaria sea un derecho universal y gratuito; que los servicios cuenten con equipos y programas especializados; que se apliquen los tratamientos de probada evidencia científica y se controle el abuso de psicofármacos; que se cree una Dirección General de Salud Mental con capacidad para poner en marcha programas especializados y que para 2011 se dote de presupuesto la ejecución las nuevas estructuras de salud mental que están planificadas en el Plan Navarra 2012.

No más excusas. Navarra puede adecuar el circuito de atención sociosanitaria y la atención de los ciudadanos con déficit intelectual y trastorno mental. Sería suficiente con la inversión que se ha hecho para el circuito automovilístico de Los Arcos. Esto es lo que verdaderamente define el nivel de bienestar.

SALUD MENTAL

 

Las personas con trastornos de salud mental, en precaria situación social

“Vulnerabilidad y exclusión” es el tema de las II Jornadas sobre Salud Mental que Cáritas celebra desde ayer en El Escorial. Con la participación de expertos de toda España, en las jornadas se analiza la situación de las personas con trastornos de salud mental que se encuentran en precaria situación social.

Cristina Sánchez - 01-12-09

                                                                             

La salud mental, una tarea pendiente en nuestro país

Los trastornos mentales constituyen uno de los mayores problemas en la salud de la población , según explica Cáritas, y generan un elevado coste en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cerca de 450 millones de personas sufren algún tipo de trastornopero menos de la mitad recibe una atención adecuada.

 

Por este motivo, el encuentro busca ofrecer un espacio de análisis y debate sobre la situación en la que se encuentran las personas afectadas por trastornos de salud mental, así como facilitar el intercambio de experiencias sobre este ámbito entre las distintas Cáritas diocesanas.

 

José Ramón Solanillas, técnico de Cáritas Española y coordinador de las Jornadas, señala que la cita pretende, además, “promover la colaboración entre entidades de salud responsables de la prestación de la atención socio-sanitaria para coadyuvar a la incorporación social de las personas con enfermedad mental y de exclusión social”.

 

Respecto a la atención sanitaria en España, una encuesta publicada por el IMSERSO revela que sólo el 4,34% de los encuestados con una enfermedad mental severa y permanente habían recibido atención sanitaria de un hospital general y sólo el 6,88% había recibido cuidados socio-sanitariosen su domicilio, comparado con el 48,8% que había recibido servicios en hospitales psiquiátricos.

 

En atención primaria y en especialidades médicas no psiquiátricas, a menudo se pasan por alto problemas de salud física de las personas con enfermedad mental. Al mismo tiempo, es frecuente que las personas con una enfermedad aguda y crónica no reciban el tratamiento integral que precisan por la insuficiente dotación de los servicios, que no pueden asegurar el tratamiento necesario.

 

LOS SIN TECHO

LOS SIN TECHO
Cáritas y la Fundación Lesmes celebran el Día de los Sin Techo 2008

- Información Local -
Bajo el lema “No tener hogar significa mucho más que estar sin techo”, el 23 de noviembre se celebra el Día de los Sin Techo 2008, una jornada convocada por Cáritas de Burgos y el Centro de Integración Social de la Fundación Lesmes para llamar la atención sobre los problemas de una parte importante de la población en el acceso a una vivienda digna y adecuada, elemento insustituible en el proceso de crecimiento y autonomía personal de los individuos.


En Burgos, los últimos datos ofrecidos por el informe FOESSA hablan de un total de 3.384 personas sin hogar atendidas, el 88,90% de las cuales son varones y un 68% no tiene ingresos. Más de la mitad de los sin techo, alrededor del 54’68% son españoles, aunque el porcentaje de extranjeros con esta problemática se incrementa en el caso de las mujeres, llegando hasta un 64% del total. Un tercio de las personas sin hogar son abstemias y nunca han consumido drogas.

Para conmemorar este Día de los Sin Techo, Cáritas y el Centro de Integración Social Fundación Lesmes llevarán a cabo varias actividades con personas sin techo en los albergues en los que residen, así como una concentración en la Plaza Mayor, a las 12 de la mañana, para mostrar a la población de Burgos las carencias de no tener un hogar. Además, el Centro Cívico Las Huelgas acogerán una exposición fotográfica, realizada por sin techo burgaleses, en la que se muestra su visión de la ciudad y sus experiencias diarias.

El problema de las personas sin techo es un fenómeno complejo y cambiante. Sus causas son múltiples y tiene sus raíces en situaciones diversas, como casos de desahucio, de realojo, jóvenes que abandonan centros de acogida o el hogar familiar sin los recursos adecuados, personas que salen de prisión o que pierden el contacto con distintas formas de asistencia social. Además, circunstancias derivadas de rupturas de proyectos familiares, o dificultades y abandonos del empleo que pueden llevar al sinhogarismo.

PROSTITUCIÓN

E.V.S.
15/11/2008

Más de 1.3000 prostitutas han participado en lo que va de año en los tres programas puestos en marcha por la Dirección General de la Mujer de la Consejería de Familia para mejorar sus condiciones de vida. Según los datos que maneja la Asociación de Ayuda ACLAD, una de las entidades que colabora con la Junta de Castilla y León, unas 3.500 personas ejercen la prostitución en la Comunidad Autónoma, la mayor parte de ellas en Valladolid y León, donde trabajan unas 800 en cada una, en Salamanca, con 700, y en Palencia, con 300.

Esta ONG, que inició su andadura en el año 1979 y desarrolla su actividad en cuatro provincias de la región –León, Salamanca, Palencia y Valladolid– es la gestora del Programa Lua, que pretende mejorar las condiciones higiénico-sanitarias y sociales de las trabajadoras del sexo.

Según asegura el coordinador del programa, Manolo Martín, desde ACLAD se trabaja fundamentalmente en el área preventiva, sobre todo con la entrega de material –preservativos masculinos y femeninos y lubrificante– e impartiendo talleres de educación afectivo-sexual en pisos, clubes, en la sede de la organización e incluso en la calle. “Nosotros no vamos para sacar a las chicas de allí –subraya Martín–, ellas son libres y bastante maduras; lo único que hacemos es ofertar un servicio técnico y de apoyo”, asegura.

En estos talleres, que alcanzan los 260 en lo que va de año, se pretende fomentar el uso correcto del material preventivo y extender pautas de educación afectivo-sexual directamente relacionadas con el ejercicio de la prostitución, desde cómo negociar con el cliente el uso del preservativo hasta las medidas para evitar contagios, pasando por pautas de estimulación sexual a aplicar con las personas que demandan este tipo de servicios o consejos por si se quiere trabajar con la regla.

Se trata de talleres eminentemente prácticos a los que se acude con “material muy didáctico” –una vagina de látex y un consolador–, en los que suelen plantearse los errores habituales en el ejercicio de la profesión y se dan pautas para evitarlos y corregirlos.

Atención sanitaria

Además del área preventiva, el trabajo de ACLAD dentro del programa Lua también abarca la atención médico-sanitaria, ya que las características de la profesión “hacen muy difícil el acceso a la red sanitaria normalizada”. “Se ejerce por plaza”, explica Manolo Martín, y eso supone que las mujeres cambian con frecuencia de lugar de trabajo –no esperan desde que solicitan cita hasta que la consiguen en el mismo lugar. Además, resulta “muy difícil” plantearle algunos problemas al médico de un centro de salud convencional si hay que empezar por contarle que “ejerces la prostitución o que eres travesti, por ejemplo”, afirma Martín. En este sentido, ACLAD funciona como “centro de salud del colectivo” donde se hacen pruebas analíticas, citologías, tratamientos para el VIH y hepatitis y seguimiento.

El programa Lua también cubre el área psicosocial, desde el que un trabajador social y un psicólogo tratan de paliar las secuelas psicológicas y las carencias sociales que, en ocasiones, afectan a las trabajadoras del sexo. Así, hay que tener en cuenta que este segmento de la población sufre mucha “soledad y desarraigo” y en numerosas ocasiones se trata de personas que vienen del extranjero para ejercer un trabajo con connotaciones negativas.

El asesoramiento jurídico, problemas relacionados con el trabajo, con la documentación o diferente papeleo completan las áreas del proyecto Lua. Manolo Martín explicó que a lo largo de 2008 se ha prestado atención a casi 1.200 mujeres. Concretamente se atendió a 509 personas en la sede de León, a 365 en Valladolid, a 223 en la de Salamanca y a 88 en Palencia. Además, se organizaron 260 a los que asistieron unas 800 mujeres en las cuatro provincias donde opera la ONG.

Cáritas

Por otro lado, tanto Ascare (Cáritas regional) como Cáritas Diocesana de Burgos también desarrollan dos programas dirigidos a mejorar la calidad de vida de las personas que ejercen la prostitución, Betania y Zoe, si bien el segundo es un programa específico para la formación de mujeres que han estado o estén en prostitución como mediadoras para que faciliten la comunicación y presenten el programa a otras compañeras.

Ana Almarza, coordinadora de estos dos programas que se desarrollan en la capital burgalesa y en Miranda de Ebro, señaló que el ejercicio de la prostitución muchas veces genera situaciones de violencia en clubes o en los pisos, por lo que la idea del programa ZOE –gestionado por Cáritas Diocesana de Burgos– es dotar a las mujeres de habilidades como mediadoras para evitar que el ambiente sea tenso.

Betania, enmarcado en las actividades de Ascare, atiende a una media anual de 130 mujeres en todos sus programas: centro de día, casa de acogida, formación y sensibilización en todo lo que rodea al fenómeno de la prostitución –desde el punto de vista sanitario, social y educativo–, y Programa Cuidándonos, dirigido a garantizar la salud física y psicológica de la prostituta.

Ana Almarza explicó que unas 70 mujeres acuden con asiduidad al centro de día del programa, un espacio “abierto” en el que además de asistir a talleres “se les acompaña en asistencia jurídica, apoyo psicológico” e incluso en la elaboración de currículum vítae.

Desde el punto de vista sanitario, Ascare ha puesto en marcha formación en centros de salud y los cursos a los que asisten las mujeres son impartidos por doctores, enfermeros y trabajadores sociales. En el caso de la casa de acogida, su acceso está limitado a personas que deciden abandonar la profesión y se enfrentan a más dificultades, mientras que existe otra línea de apoyo para ayudar a las mujeres que dejan la prostitución a poder pagar un alquiler.

Clubes y pisos

La experiencia de ACLAD refleja que en Castilla y León “no existen grandes mafias”; aunque sí hay “quien trabaja obligada”; suele ser población rumana a la que “la pareja de la chica o el hermano son quienes la obligan a prostituirse”.

De acuerdo a la información que maneja la ONG, la mayoría de la prostitución en Castilla y León se ejerce en clubes y en pisos, si bien en la calle puede encontrarse población nigeriana y guineana, rumana –trabajando en la carretera–; travestis y transexuales sobre todo de Ecuador y Brasil y, cada vez con menos frecuencia, población con problemas de drogodependencia.

Respecto a los clubes, en los de ciudad, las profesionales del sexo suelen ser más mayores y entre ellas suele encontrarse más población española, el resto son sudamericanas, rumanas y mujeres de los países del Este. Sin embargo, en los clubes de carretera “las españolas son contaditas” y suele tratarse de mujeres sudamericanas, nigerianas y de Europa del Este.

En la prostitución que se ejerce en los pisos “hay un poco de todo”, pisos sólo de españolas, sólo de hombres, de travestis… La mayoría de la población es extranjera y alrededor del 70 por ciento, sudamericanos, añade Martín.

Afectados por la crisis

Según los datos que maneja la Asociación Nacional de Empresarios de Locales de Alterne (Anela), el sector de la prostitución también se está viendo afectado por la crisis económica actual. Según asegura, el número de clientes ha bajado un 20 por ciento y los ingresos han disminuido entre un 30 y un 40 por ciento, ya que el volumen de clientes no sólo ha bajado sino que además gastan menos dinero.

Manolo Martín, de Aclad, sostiene que el servicio en un piso cuesta entre 40 y 50 euros. De esta cantidad, una mitad va para el piso y otra para la persona que trabaja.

Según recuerda, en el año 96 un servicio valía entre 3.000 y 4.000 pesetas, algo que refleja que “el nivel de vida ha subido mucho más que el precio de la prostitución” que “más o menos vale lo mismo ahora que hace unos años”.

 

ATENCIÓN Y APOYO PSICOSOCIAL

Después de haber trabajado en el trimestre anterior las relaciones sociales, los procesos de comunicación verbal y no verbal y las habilidades sociales; abordamos en este trimestre las actividades de la vida diaria trabajando actividades de recuperación, mantenimiento y entrenamiento de las funciones cognitivas, centrándonos en la orientación temporal, espacial, memoria, atención, razonamiento...complementando los conocimientos teóricos con un trabajo práctico en pequeños grupos que consiste en el diseño y creación de  materiales lúdicos dirigido al mantenimiento y mejora de dichas capacidades cognitivas, terminaremos con las técnicas, procedimientos y estrategias de intervención en resolución de conflictos y modificación de conducta para situaciones de atención planteadas con personas mayores, discapacitadas y convalecientes.